miércoles, 31 de mayo de 2017

Una persona corriente



Quiero agradecer a la persona que me enseño un poco a ser como soy, cuando eres muy jovencita y empiezas en el mundo del trabajo, te introduces a veces en una jungla donde hay muchos intereses , gente trepa , te ponen todo tipo de trabas y empiezas a tener muchos sinsabores , conoces compañeros buenos , malos y regulares , tienes mucho que aprender y a veces la vida te enseña con su forma más cruel y es muy importante la persona con la que inicias tu primer cometido laboral.

Yo con mis 15 años me acerque al mercado laboral como una simple auxiliar administrativa pero me encontré con el mi primer jefe. Y cuanto aprendí de él y de su forma de trabajar. Con los años comprendí la suerte que tuve y lo considerado que fue yo por aquel tiempo tenía una formación muy “justita” y podría haberlo pasado realmente mal con otra persona.

Porque provenía de una familia como tantas en aquella época en esta España, del año 1963 aproximadamente, en la que nuestros padres no nos habían preparado muy bien sino todo lo contrario. Ellos, los pobres,  solo podían transmitirnos valores, la subsistencia diaria, quererte mucho, y poco más.

Pero entonces tuve la suerte de encontrarme justo con él e ir viendo cómo iba desarrollando su jornada laboral, un hombre serio, justo , tenaz, afable firme y tremendamente educado. Resolviendo su cometido unas veces muy grato, y, otras muchas, bastante menos; yo ahí ayudándole lo poquito que podía, y sobre todo, observándolo mucho. Y lo más importante que aprendí fue que todo trabajo es importante,  hasta el más insignificante, y tienes realizarlo siempre lo mejor que puedas. Quizá suena a tópico, pero no siempre se hace así. Que son muy importantes las personas que nos rodean, y a no rendirse ante las contrariedades, y poder llevar la cabeza bien alta del trabajo bien hecho, y pasar por la vida no despreciando a nadie, valorando nuestro entorno y no dejándonos pisar el terreno por nada ni por nadie.

Y siempre le guardaré ese aprecio y también ese cariño a un gran señor que solamente era como otros muchos una persona muy corriente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario