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martes, 3 de julio de 2018

Barritas Heladas de Coco





Ingredientes: 
(9 barritas)
                      
Dificultad: Baja
Tiempo: 15 minutos + 1,5 h congelación

• 2,5 tazas de coco rallado
• 200 ml de nata líquida de coco 
• 1 c. sopera de extracto de vainilla
• 2 c. soperas de aceite de coco
• 100 gr. tableta de chocolate negro 80%
• Opcional: 2 c. soperas de sirope de coco, agave, o al gusto.
• Topping: 2-3 c. soperas de coco rallado

Elaboración masa 

En un bol, verter el coco rallado, el aceite, la nata y la vainilla, y mezclar bien hasta que quede una masa homogénea y maleable. Si se desea aumentar su dulzor, se puede añadir el sirope de coco, o de agave.

Verter la mezcla en un molde rectangular o cuadrado, cubierto previamente de papel de horno, y esparcir bien toda la masa hasta que quede un bloque compacto, firme y de unos 2 cm de espesor. Dejar enfriar en el congelador unos 30 minutos.

Elaboración cobertura de chocolate

En un cazo al baño maría, derretir poco a poco el chocolate negro hasta que quede totalmente líquido y fundido. Verterlo en un bol y dejarlo enfriar 5 minutos.

Sacar la masa del congelador y cortar las 9 porciones de barritas heladas.
Bañar las barritas, una a una, en el bol de chocolate derretido y con la ayuda de dos tenedores ir colocándolas encima de papel de horno para que se solidifique la cobertura. Ir espolvoreando por encima de la cobertura, el coco rallado como topping (antes de que se solidifique del todo).
Una vez obtenidas las barritas, dejarlas en el congelador 1 hora mínimo, antes de servir.

Debo confesarlo, estas barritas son mis favoritas. Por eso no podían faltar las Barritas Heladas  de Coco para compensar el calorcito del verano, mientras nos refrescan por dentro y nos transportan a la sombra de unos cocoteros.
No hay nada tan delicado como el crujido del chocolate en la boca, mientras se va fundiendo y mezclando con el sabor del coco.
Además de ser saludables,  no contienen azúcar, ni lácteos, ni gluten,  son de una gran riqueza en fibra saciante, polifenoles, triptófano, y propiedades energéticas, antifúngicas, antivirales y antibacterianas.



P. Sardinero



sábado, 23 de junio de 2018

La perla roja



La cereza es un fruto carnoso de forma redondeada que tiene en su interior una única semilla envuelta en una capa leñosa, el hueso. Brillante, dulce y crujiente es deseada y esperada durante meses para gozar de su sabor y beneficiarnos de sus nutrientes. Sus tonos bermellones, del rojo al morado oscuro, son muestra inequívoca de una gran riqueza en vitaminas A y C. La cereza es la perla roja, la joya de la corona de las frutas de primavera. Ese enorme potencial antioxidante, superior al de la mayoría de frutas, es causa de grandes efectos beneficiosos para la salud de quienes las consumimos. Son buenas para la regeneración celular, antiinflamatorias y depuran nuestro organismo. El sencillo hábito de tomar un puñado cada día durante toda la temporada puede prevenir y ayudar en muchas enfermedades. 

Aparecen cuando la primavera ya está en todo su esplendor, son el complemento depurativo perfecto para dietas de control de peso o de limpieza de toxinas. A su gran riqueza nutritiva se une su reducido valor calórico, con más de un 80% de agua, un elevado contenido en potasio y nulo en sodio y en grasas. Ayudan a descargar el hígado, a limpiar cálculos de vesícula y también de riñón, aliviando las artritis y edemas. Su riqueza en fibra favorece también el tránsito intestinal. 

Al mismo tiempo que hidratan, remineralizan el organismo con un aporte considerable de calcio, magnesio y zinc. Por eso son ideales tanto para etapas de crecimiento como para proteger de la osteoporosis en la menopausia y en la tercera edad. Además proporcionan hierro junto a una notable porción de ácido fólico, por lo que están más que indicadas durante el embarazo. 

Son de un dulzor pronunciado, es una fruta energética y reconstituyente. Contiene un 12% de hidratos de carbono en forma de fructosa, de absorción lenta, por lo que su índice glucémico es muy reducido. 

El origen de esta fruta se sitúa en el Mar Negro y en el Mar Caspio, difundiéndose después hacia Europa y Asia por medio de las aves y las migraciones humanas. Hace muchos siglos esta pequeña fruta fue muy popular entre los griegos y luego bastante apreciada por los romanos, quienes no dudaron en propagarla a lo largo de todo su Imperio hasta que su cultivo alcanzó países como España. Desde entonces, la cereza ha sido enormemente expandida por diferentes naciones. 

Actualmente la cereza se cultiva en países de clima templado, siendo sus mayores productores, Estados Unidos, Irán, Turquía, Italia, Rusia, México, Alemania Francia y España. 

En nuestro país son innumerables las cantidades de especies que se cultivan, en provincias como Barcelona, Zaragoza, Alicante o Cáceres, siendo esta última reconocida mundialmente por su gran producción de cultivos y belleza inigualable durante el periodo de floración. La mayor parte de las cerezas que se cosechan en España tienen su origen en el Valle de Jerte donde, además, son recolectadas especies como la picota, una variedad muy demandada que resulta bastante resistente. Es más pequeña, pero su sabor la hace muy popular entre los consumidores. 

Hay algo importante que debemos saber antes de adquirir cerezas, las cerezas no maduran una vez que son recolectadas por lo cual es necesario asegurarnos de que se encuentren en su mejor estado de madurez. Podremos saberlo casi inmediatamente, ya que tienen un peso consistente, un color y brillo bastante intenso y su tallo es verde, rasgos que nos darán una noción de su frescura. 

Para conservarlas solo hay que guardarlas en la nevera. Es importante hacerlo sin caer en el error de lavarlas a menos que vayan a ser utilizadas de inmediato. También debemos evitar colocarlas demasiado cerca de alimentos o frutas que despidan un olor penetrante, debido a que las cerezas los absorben con facilidad. 

Normalmente consumimos las cerezas frescas, aunque también a nivel gastronómico son muy apreciadas. Con ellas se preparan licores y postres como tartas, pasteles, mousses, compotas y mermeladas, en almíbar o escarchadas. También están deliciosas en gazpacho, ensalada, o como acompañamiento de carnes grasas como el pato y el cerdo. ¡Pero cuidado! porque las cerezas son una tentación y es fácil que se terminen antes de elaborar la receta con ellas. 

Ya llega la temporada, y dura muy poquito, así que aprovecha para recargar las baterías con este delicado y delicioso fruto. 



P. Sardinero

miércoles, 17 de mayo de 2017

La horchata







Desde hace siglos, los españoles, disfrutamos de esta dulce y rica bebida tan nuestra. La horchata es originaria de la Comunidad Valenciana. Todos o casi todos sabemos que se obtiene de la chufa, pero pocos son ya los que conocen este pequeño tubérculo, que si no fuera por la veraniega bebida habría desaparecido del mapa. Entre la gente de mi edad quien no se ha comprado un cucurucho de chufas a la entrada de los cines de verano en aquellos puestos callejeros.

La horchata es la bebida más famosa del Levante Español, su fórmula es bien sencilla, se elabora con chufas, agua y azúcar.

La chufa es el alimento de moda por sus propiedades saludables, aunque ya, en la antigüedad, los egipcios sucumbieron a sus encantos y eran conocedores de sus beneficiosas propiedades, de hecho, a la horchata se la ha llegado a denominar “La bebida de los faraones”

Algunos piensan o creen que la chufa llego a España durante la dominación árabe debido a la influencia que su legado ejerció con su agricultura en las provincias de Valencia.

En España la primera noticia que se tiene sobre la palabra chufa proviene de un galeno que atendió al rey Jaime II de Aragón. Este galeno le recetó comer en ayunas, durante el invierno, 30 o 40 raíces de chufa y así conseguir paliar las terribles hemorroides y achaques que padecía, y que le estaban amargando la vida.

Sobre el origen del nombre de esta sabrosa bebida poco se sabe. Cuenta una antigua leyenda popular, que el rey Jaime I montado en su caballo probo un zumo vegetal lechoso de las manos de una bella doncella. El rey, impresionado por su exquisito sabor, le dijo a la muchacha: Açò és or, xata, que en castellano significa: “Esto es oro, chata “

Antiguamente, la chufa, no solo fue utilizada para curar hemorroides, también en la zona de Levante se utilizó para sanar afecciones respiratorias, estomacales o como remedio para las diarreas.

En nuestros días están aún por descubrirse todas las propiedades saludables de esta deliciosa bebida, si bien ya conocemos algunas. La horchata de chufa está considerada como un superalimento natural, es sinónimo de salud y energía gracias a su alto contenido en almidón, proteínas y minerales como el fósforo, magnesio, potasio y el hierro.

Es ideal para los ancianos, mujeres embarazadas y para el crecimiento de los niños y adolescentes. Por si fuera poco, es apta para los alérgicos a la lactosa y para los intolerantes al gluten.

Su secreto está en la chufa, un pequeño tubérculo que no se cultiva en ningún otro lugar de Europa más allá de la Horta Nord valenciana (conjunto de 16 ciudades, las más importantes de Valencia, productoras de chufa). Allí, en plena tierra fértil crece la chufa con D.O. Valencia y junto a ella un sin fin de frutas y verduras que hacen de esta zona un punto más que recomendable para disfrutar de la mejor horchata en plena naturaleza.

Hoy en día podemos disfrutar de esta rica bebida refrescante durante todo el año al mismo tiempo que podemos acompañarla con unos ricos fartons, que es como lo hacen los valencianos.

Soy una apasionada de la horchata, lo confieso, su delicioso sabor me hace recordar mi infancia y aquellos veranos maravillosos que pase en las costas de Levante. Cuantos vasos de deliciosa horchata fresquita me habré tomado, en aquel vaso alargado y estrecho sorbiendo de una pajita, mientras intentaba, sin éxito, deshacer el dichoso granizado.

Todavía retengo aquel tiempo en mi memoria, en las tardes sofocantes de verano, sentados en un destartalado quiosco junto al mar, mientras contemplábamos aquellos asombrosos atardeceres naranjas, y en las manos, todos y cada uno, un vaso de horchata.



P. Sardinero



miércoles, 26 de abril de 2017

Aceite de palma



    

Ultimamente el aceite de palma está en boca de todos, su efecto nocivo para la salud ha alertado a una buena parte de la sociedad. Actualmente el aceite de palma se ha convertido en el aceite vegetal más demandado, ocupa el segundo puesto en consumo en el mundo, situándose incluso por delante del aceite de soja.

Este árbol crece de forma rápida y fácil en selvas y bosques tropicales. De su fruto se extrae un aceite que resulta más barato que el aceite de semillas o de oliva. Se utiliza tanto la pulpa como la almendra, de la cual se extrae el aceite, mientras que los residuos sólidos son utilizados en la alimentación animal.

Debido a su bajo coste ha llegado a formar parte importante en la elaboración de productos de alimentación industrial. Es utilizado para elaborar los aceites de fritura, margarinas, platos precocinados, sopas, patatas fritas, helados, bizcochos, galletas, etc.

El aceite de palma también se utiliza en la industria química y de cosmética, así como para la elaboración de los denominados agrocombustibles.

Para los países pobres, particularmente los de África y Asia, donde existen muchas carencias, el aceite de palma resulta un producto muy valioso. Es un ingrediente básico para cocinar, de la misma forma que en el mediterráneo no se entendería la cocina sin el aceite de oliva.

Las grandes multinacionales también han echado el ojo a esta planta. El aceite de palma se ha convertido en la materia prima preferida de la industria alimentaria en sustitución de otros aceites como el de colza, sésamo y oliva debido a que estos resultan bastante más caros.

Uno de cada dos productos del supermercado lo contiene a pesar de ser conscientes que resulta muy nocivo o nada recomendable para nuestra salud. Estudios recientes han demostrado que aumenta los niveles de colesterol LDL (malo) y puede relacionarse con casos de cáncer.

Debido al afán desmesurado de algunos países desarrollados en obtener beneficios con este producto, países como Indonesia y Malasia están sufriendo terribles consecuencias medioambientales. Allí se talan e incendian grandes extensiones de selva para conseguir inmensas plantaciones.

Actualmente en Borneo y Sumatra, países que cuentan con una gran biodiversidad, un tercio de las especies de mamíferos están en grave peligro debido al desarrollo insostenible de los cultivos que están destruyendo sus hábitats. Si el ritmo de deforestación continua, los orangutanes podrían extinguirse en la naturaleza en los próximos diez años, y los tigres de Sumatra en menos de tres.

En Camerún, el gorila, el chimpancé, el elefante y otras muchas especies sufren la misma y grave amenaza.

En este proceso de “reforma agraria” y de crear estas plantaciones industriales, miles de indígenas y campesinos han sido despojados y desalojados por la fuerza de sus tierras, por no mencionar el abuso y la eliminación de los más elementales derechos laborales y humanos que sufren los que allí trabajan.

Es inquietante y sobrecogedor saber que estas industrias ya cuentan en su haber con más de 74 millones de hectáreas de selvas y bosques destruidos y sus productos se distribuyen al mundo entero. Su mercado en exportaciones mueve una cifra de 36 millones de dólares al año y se estima que en el 2017 la producción alcanzara 64,5 millones de toneladas.

Una de las empresas que más utiliza esta materia prima es Nestlé, compraron 420.000 toneladas de aceite de palma, un 1% de la producción global. Otras empresas que lo utilizan, aunque a menor escala, son Kellog’s, Burger King, Mc Donalds, Colgate y Starbucks, aunque la lista es bastante más larga.

En consecuencia, y para que nos vayamos concienciando, el consumo de aceite de palma es nocivo para nuestra salud, su cultivo destruye el medioambiente como consecuencia de la deforestación, lo que favorece el cambio climático y para rematar, acaba con el hábitat y la vida de multitud de especies animales.

Os ánimo para que no consumáis productos que contengan aceite de palma, aplaudo a Eroski y Alcampo por sumarse a la iniciativa que puso en marcha el supermercado Supersano que pedía suprimir la venta de todos los productos elaborados con aceite de palma.

P. Sardinero

domingo, 16 de abril de 2017

Ajo negro

Muchas son las bondades de este producto culinario.

Os quiero hablar del ajo negro, no sé si lo conocéis pero es un gran remedio para prevenir enfermedades y mejorar otras, así tomando ajo regularmente prevenimos o mejoramos: la migraña, enfermedades cardíacas, la hipertensión, la diabetes, la fatiga, la gripe ya que sirve también como antibiótico natural, tiene poderes anticancerígenos, se usa para controlar problemas de tipo emocional como la depresión, protege el hígado, ayuda a asimilar mejor las grasas, desacelera el envejecimiento, y un largo etc.

El ajo negro se asimila mejor que el normal. Así las personas que tengan problemas para digerirlo con éste no tendrán molestias estomacales, este dato lo sé por experiencia propia.

También tiene algunas contraindicaciones, deben evitarlo las mujeres embarazadas o en lactancia, también como tiene propiedades anticoagulanrtes está contraindicado en personas que vayan a someterse a una intervención quirúrgica y en personas que tengan la tensión baja ya que tiene una sustancia que disminuye ésta.

Este tipo de ajo es un invento de los japoneses, lo descubrió un científico, ya que como a la mayoría de los asiáticos no les gusta su olor fuerte, este científico hizo una prueba, sometió una cabeza de ajo durante un mes a un proceso de ahumado y fermentación, al cabo de este tiempo descubrió como el ajo había cogido ese color oscuro que le caracteriza y apenas tenía olor y comprobó que se habían aumentado sus propiedades hasta en diez veces.

Por todo esto, os animo para que lo probéis y así os podréis beneficiar de sus magníficas propiedades. Como todo remedio natural, los beneficios se aprecian a largo plazo pero merece la pena la espera, vuestro organismo os lo agradecerá.

M.C. Prieto