lunes, 3 de febrero de 2020

Visita al Museo del Prado

13 de enero de 2019

Marta Mena


La Mesa de los pecados capitales
Es un óleo sobre tabla de Jerónimo Bosch (1450-1516), más conocido como "El Bosco", nacido en los Países Bajos. Fue Felipe II el primero y más insigne coleccionista de sus obras, las cuales adquiere para el Palacio de El Pardo y el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial.

En este cuadro el autor representa los siete pecados de una forma original:

En La lujuria se nos muestra una tienda de color rojo intenso plantada en el campo, donde dos parejas de enamorados celebran una comida campestre. A un lado, dos juglares o bufones. En primer plano, instrumentos musicales.

La Gula se representa en una escena de interior con cuatro personajes. En una mesa hay un hombre gordinflón comiendo. A la derecha, de pie, otro que bebe ansiosamente de una jarra, lo que hace que el líquido se le caiga pos las comisuras de los labios. A la izquierda, una mujer presenta una nueva vianda en una bandeja. Aparece un niño obeso, simbolizando el mal ejemplo que se da a la infancia, que reclama la atención de su obeso padre. En primer plano, una salchicha se asa al fuego.

La Avaricia. Se escenifica mediante un juicio donde el juez, lejos de impartir justicia, acepta un soborno de una de las partes o incluso de ambas.

La Pereza. Se reproduce una escena donde un eclesiástico duerme ante la chimenea, mientras que una mujer (la Fe), trata de despertarlo para que cumpla con sus deberes de oración.

La Ira se muestra con dos campesinos borrachos peleándose a la puerta de una posada, con jarras de bebida. Uno de ellos es detenido por una mujer, mientras el otro tiene un banco en la cabeza.

La Envidia se manifiesta con una pareja de enamorados (un burgués intenta seducir a la mujer de otro), dos señores (un mercader que mira a un joven noble que lleva un halcón en el puño), y en la calle, dos perros con un hueso.

La Soberbia se representa mediante una mujer en un interior con pequeños objetos de uso cotidiano. Se mira en un espejo que hay en un armario, sostenido por un demonio; a un lado, se ve otra estancia con figuras.

El centro del cuadro lo preside una imagen de Cristo saliendo de su tumba. Se dice que toda la circunferencia es el ojo de Dios, y la imagen de Cristo es su pupila. Bajo esta imagen hay una inscripción en latín: CAVE CAVE DNS (DOMINUS) VIDET ("Cuidado, cuidado, Dios lo ve"). Es una referencia a la idea de que Dios lo ve todo, hasta los comportamientos que se esconden a los ojos de las personas.

En cada una de sus esquinas, hay cuatro pequeños círculos que representan "La muerte", "El juicio", "El infierno", y “La gloria". Están representadas según la iconografía tradicional en la pintura medieval. De todas ellas, la más llamativa es la del infierno, ángulo inferior izquierdo. Con tenebrosos tonos rojos vuelve al tema de los siete pecados capitales, representando siete diferentes formas en que los demonios torturan a los condenados por incurrir en cada uno de los pecados capitales. Aquí se percibe un tono típicamente bosquiano, pues es esta una representación, en menor tamaño, de los otros infiernos que pueden verse, entre otros, en los postigos derechos del Juicio Final de Viena, el Carro del Heno y el Jardín de las Delicias. La muerte aparece representada a través de una imagen típica del Ars moriendi: el lecho de un moribundo con la cabeza vendada, al que rodean un médico, tres religiosos, una monja, un ángel y la muerte; en otra estancia se ve a los familiares. El juicio se representa al modo medieval, con Dios entre ángeles, y los muertos saliendo de sus tumbas. La Gloria tiene forma de un palacio en el que está Dios con ángeles. Se representa también al arcángel San Miguel y a San Pedro.

Arriba y abajo hay dos inscripciones en latín, que provienen del Deuteronomio (capítulo 32):
32, 20 "Entonces dijo: Les ocultaré mi rostro, / para ver en qué terminan" (parte inferior)
32, 28 "Porque esa gente ha perdido el juicio / y carece de inteligencia"
32, 29 "Si fueran sensatos entenderían estas cosas, / comprenderían la suerte que les espera" (parte superior)

Juana Taboada

La historia se repite, volver al Museo del Prado es muy gratificante, pensar en descubrir cuadros nuevos, detalles que en otras ocasiones no has visto.

En esta ocasión hemos ido con Ruth, nuestra profesora de Sociales, con sus explicaciones todo es más fácil de entender.

No soy ninguna experta en arte, pero entre todas las obras vistas este día, me gustaría comentar el cuadro de “La anunciación”, realizado en 1430 por Fra Angélico, pintor del Quattrocento italiano, que tardó dos años en ejecutarlo.

Se trata de un retablo más bien pequeño comparándolo con otros lienzos del Museo. Durante la Segunda Guerra Mundial fue sacado de Italia por los alemanes, regresando de nuevo al país por mediación de Rodolfo Siviero.

Me parece un cuadro precioso, con sus colores finos y elegantes, entre los que destacan el rosa, el azul y el oro. La túnica del ángel de color rosa, marcando los pliegues tan perfectos y definidos, y toda bordeada en pan de oro. La Virgen lleva un manto azul, también con detalles de oro. Las dos caras son dulces y aniñadas. Todo esto contrasta con la representación al lado izquierdo del retablo de Adán y Eva, en el momento en que son expulsados del Paraíso por comer la fruta prohibida.

En mi opinión el pintor quiso reflejar en este retablo “el bien, la bondad” contra “el mal, el pecado”.

He comentado esta obra, pero cualquiera de ellas es digna de mención. Ir de visita al Museo del Prado es un lujo.



Celestino López

El día 13 de enero hicimos una visita al Museo del Prado, dos profesoras, varias alumnas y un solo alumno. ¿Por qué pongo un solo alumno? Porque me gustaría que participaran más jóvenes y mayores en este tipo de actividades, para así enriquecernos mucho más culturalmente.

La profesora de Sociales, Ruth, fue una excelente guía, conocedora del Museo, que nos guio por algunas de las obras más notables, catalogadas como obras maestras, de pintura flamenca, alemana, italiana y española de los siglos XV y XVI.

Tengo muy poca idea de pintura, pero sí puedo decir “cuántos genios hay en este Museo”

Las obras que más me gustaron fueron: “El lavatorio” de Tintoretto, el “Autorretrato” de Durero, el “Descendimiento” de Van der Weyden (portada), “Carlos V en la batalla de Mühlberg” de Tiziano, y “Una fábula” de El Greco (portada).

No pudimos ver la cantidad de obras que nos hubiera gustado, ya que íbamos con la hora muy ajustada.

Además de pintura, hay unas esculturas de mármol colosales, de las que me impresionó una que estaba situada en el centro de una sala, que representa unas águilas.

Os podría decir que a mí antes me daba igual ver un cuadro que otro, pero cuando llevas una guía que te explica tan bien, de esa manera tan técnica, que te introduce en el cuadro y te hace sentir la pintura, se percibe de otra manera.

Me gustaría que la próxima vez que hagamos una visita fuéramos más alumnos.



Mercedes Gozálvez

El carro de heno (El Bosco)

Esta obra de estilo flamenco fue realizada a principios del siglo XVI por El Bosco, un pintor nacido en 1450 y fallecido en 1516, pocos años después de pintar este cuadro. Fue adquirido por Felipe II en 1570 y llevado a El Escorial. Posteriormente se hizo una copia para su disfrute, que se quedó en El Escorial, y el original está en el Museo del Prado.

En España es donde más obras se pueden admirar de El Bosco, gracias a Felipe II, gran admirador de este pintor.

"El carro de heno" es una obra en forma de tríptico dedicada al pecado. Con este cuadro El Bosco nos quiere mostrar cómo el ser humano, independientemente de su clase social y de su lugar de origen, está tan poseído por el deseo de gozar y de acaparar riqueza que se deja engañar por el demonio. La lección que nos quiere dar es que debemos alejarnos de los bienes terrenales y de los placeres del cuerpo para evitar la condenación eterna.

En la tabla de la izquierda nos presenta cómo los ángeles caídos del cielo, conforme se van acercando a la Tierra, se van convirtiendo en monstruos, así como la creación de Eva, la tentación con una serpiente con cabeza de mujer, y la expulsión de Adán y Eva del Paraíso.

En la tabla central, con un gran amasijo de personajes, parece que quiere plasmar la eterna felicidad con una pareja en lo alto del carro, al que todos aspiran a subir, incluso con escaleras. Todo vale con tal de llegar a alcanzar la felicidad. Desde el Papa al Rey, desde los nobles a la gente del pueblo; todos quieren alcanzarla. Los enamorados en lo alto están escoltados por un ángel y por un demonio, los dos tratando de llevarse sus almas. El ángel es el único que parece darse cuenta de que Dios los está contemplando desde el cielo y le está pidiendo ayuda. Nadie más lo mira. A la derecha de la carreta, una serie de monstruos tira de ella conduciéndola hacia el infierno.

En la tabla de la derecha, está representado el infierno, con sus llamas en la parte de arriba, y abajo algunos condenados que ya están sufriendo diversas torturas.

Cuando este tríptico está cerrado, vemos pintado un hombre que camina por el sendero de la vida apartando con un palo a las tentaciones que le acosan. Esta parte está pintada con una técnica llamada “grisalla”, que consiste en que, con un solo color de diversas tonalidades, se da volumen a la imagen, con un resultado final que parece un resultado escultórico.

Es un cuadro un tanto caótico debido a la gran cantidad de personajes representados, muchos de ellos mitad humanos, mitad animales. Es necesario fijarse mucho en cada detalle y muy difícil saber interpretar lo que quiso decirnos El Bosco con ellos. Es admirable con qué imágenes tan extrañas y extravagantes expresa sus sátiras y críticas a la sociedad del momento, incluida la Iglesia, representada por un cura barrigón, con un vaso de vino en una mano y el rosario en la otra.




Mercedes Raposo

Venus y Adonis 

"Venus y Adonis" es una obra del pintor italiano Paolo Veronese. Es un óleo sobre lienzo, pintado hacia 1580.

Hasta una restauración efectuada hacia 1988, el cuadro medía 2,12 metros de alto y 1,91 m de ancho. En dicha intervención, se le retiraron unos añadidos fechables en el siglo XVIII, que aumentaban la presencia del cielo y falseaban sus proporciones originales. Su formato actual es horizontal o apaisado, no vertical como se ve en muchas imágenes antiguas.

Este cuadro fue adquirido por Velázquez para el rey Felipe IV de España durante su segunda estancia en Italia (1649-51). Se exhibe actualmente en el Museo del Prado de Madrid. Se cree que hacía pareja con otro cuadro, "Céfalo y Procris", ahora conservado en el Museo de Bellas Artes de Estrasburgo.

Veronés trata aquí un tema mitológico. Se representa a Venus, que tiene sobre su regazo a Adonis durmiendo. Ella le acaricia y le da aire. La postura de Adonis es un escorzo. Viste ropajes rojos, que contrastan con la piel blanca de Venus. Otra diferencia entre ellos es la luz: Venus aparece iluminada, mientras que Adonis permanece más bien a la sombra. Adonis era un joven aficionado a cazar, y la diosa intuye que él morirá en una de sus incursiones, por lo que intenta retenerle. La diosa mira a Cupido, que está acariciando a un galgo. También se ha interpretado que ese perro, a diferencia del que está en el suelo durmiendo, está deseoso de salir a cazar, y Cupido lo retiene a la fuerza, para impedir que despierte al joven. Si Adonis despierta, creen que irá de caza. Estas tres figuras se enmarcan en un paisaje vivo, de sombríos tonos verdes y azules en el cielo.

El punto de vista adoptado por el pintor es más bien bajo, obligando al espectador a mirar de abajo arriba. Esto sugiere que pudo estar pensado para colocarlo en la parte alta de la pared.

La escena posterior, cuando Adonis sale a cazar y Venus intenta retenerlo, la representó Tiziano en otro famoso cuadro también en el Museo del Prado.



Celestino López

En la puerta del Prado
a las once hemos quedado,
con una docena de flores
muy bonitas, de colores.
En la Puerta de Murillo,
frío hace un poquillo.
En la puerta un caballero
las espera con sombrero.
No era la hora de entrar:
un cafecito en el bar.
A la hora de entrar
nos quitamos el gabán,
recorremos el Museo
como si fuera un paseo.
Buena guía llevamos,
que fue muy bien explicado.

Helen Keller y Anne Sullivan


Helen Keller nació en 1880 en Alabama. Nació perfectamente sana, pero a los 19 meses sufrió una grave enfermedad que le provocó la pérdida de visión y de audición de manera total. Nunca pudo recuperar ninguno de estos dos sentidos. Falleció a los 88 años y durante toda su vida fue sorda y ciega.

A pesar de esta grave incapacidad para comunicarse, fue la primera persona sordociega en graduarse en la universidad. Durante toda su vida adulta tuvo una participación muy activa en política y escribió varios libros de éxito, uno fue sobre su vida y los demás de temas políticos.

¿Cómo fue posible este increíble suceso? Hubo tres circunstancias que lo favorecieron:

1. Estaba dotada de una gran inteligencia.

2. Nació en una familia con medios económicos, bien relacionados y que se volcó en ella.

3. En su vida se cruzó otra mujer, Anne Sullivan, con una inteligencia tan grande como su paciencia y generosidad, que sacó a Helen del oscuro pozo en que estaba condenada a vivir.

Es difícil comprender la situación de esa criatura al encontrarse a oscuras, sin ver nada, y sin escuchar ningún sonido. Solamente el tacto con sus padres y familiares la hacía saber que estaban allí. La forma que tenía para comunicarse con las personas era a base de gestos, que ella misma había inventado. Conforme fue creciendo, esta incapacidad para comunicarse fue haciéndose más traumática para Helen y su familia, y la niña se fue haciendo ingobernable. Todos los intentos para curarla fracasaron.



Cuando cumplió los 7 años, desde una escuela especializada en personas ciegas mandaron a Anne Sullivan, una joven que había tenido discapacidad visual cuando era pequeña y que había obtenido el título de maestra para niños ciegos. Inmediatamente Anne solicitó una habitación separada del resto de la casa para las clases, y se encerró con la niña decidida a comunicarse con ella por medio del deletreo de palabras en la palma de la mano.

Al principio Helen no entendía que hubiera una palabra dedicada a cada objeto y se resistió fieramente a las enseñanzas de Anne. De hecho, cuando trató de enseñarle la palabra "taza", Helen se enfadó tanto que rompió la suya.

Al cabo de un mes de repetidos intentos por parte de Anne, Helen se dio cuenta de que los movimientos que su maestra hacía en su mano mientras dejaba correr agua sobre su otra mano, simbolizaban el concepto de “agua”. Fue un momento muy emocionante para ella darse cuenta de la relación que existía entre los movimientos que hacía Anne en la mano y un objeto. Inmediatamente le pidió que le enseñara más palabras. Con el paso de los días y siguiendo el mismo procedimiento, aprendió a entender palabras y acciones.

Desde el comienzo Anne la trató como una niña normal, con la diferencia de que, en lugar de hablarle, deletreaba las palabras en su mano. Su sentido del tacto se fue perfeccionando de manera increíble, pues su cerebro había tomado el control.

La niña fue formando parte de las conversaciones familiares mediante el deletreo de las palabras en su mano con ayuda de su profesora.




El siguiente desafío para Helen fue aprender a leer. Anne le proporcionó pequeños cartones con las letras en relieve con el que formaba las palabras. Muy pocos meses después fue capaz de leer y escribir mediante el sistema Braille con la utilización de sus cada vez más sensibles manos. También mediante el tacto de sus manos aprendió a leer en los labios de las personas y a percibir el movimiento y las vibraciones de las mismas al pronunciar las palabras (este método era utilizado por las personas sordas).

Todo el tiempo era ayudada por Anne, que la acompañaba a las clases y traducía todo lo que explicaban los profesores. Gracias a su gran inteligencia, incluso aprendió idiomas.

Durante los 49 años que permanecieron juntas trabajaron muy unidas. Helen se convirtió, con una gran fuerza de voluntad, en defensora de los derechos de los discapacitados sensoriales. Fundó una asociación para la prevención y el tratamiento de la ceguera, defendió los derechos de los trabajadores minusválidos, el sufragio femenino, el pacifismo y el control de la natalidad.

Recibió muchos honores en reconocimiento a todo su trabajo para mejorar la vida de las personas discapacitadas.

Anne Sullivan murió antes que Helen. Gracias a su gran ayuda, Helen llegó a tener una vida normal. Sin ella, quién sabe lo que habría pasado con aquella niña.

Helen murió en 1968 con casi 88 años.

Fueron dos grandes mujeres que inventaron una forma de comunicarse para las personas sordociegas y que aún se sigue utilizando en la actualidad.

Mercedes Gozálvez

Hay una película sobre esta historia titulada “El milagro de Ana Sullivan”



martes, 21 de enero de 2020

INÉS DE CASTRO EN LA LITERATURA

Los amores de Doña Inés de Castro y del infante Don Pedro de Portugal constituyen un acontecimiento realmente ocurrido en la historia portuguesa de mediados del siglo XIV. Aunque de sobras conocido, recordaremos brevemente su desenlace trágico: por razones tanto dinásticas como políticas, el rey Don Alfonso de Portugal, persuadido por tres ministros consejeros, durante una ausencia de Pedro, sentencia la muerte de su concubina, Inés de Castro, que es degollada en Coímbra el 7 de enero de 1355. No bien el infante sube al trono, en 1357, lleva a cabo un programa de venganza y de apoteosis de la amada muerta. Mata ante todo a los ministros consejeros y declara haberse casado, 7 años antes, con Inés (para que esta sea reconocida como reina); después, manda construir un monumento fúnebre más digno en el Monasterio de Alcobaça y cuando está listo, en 1362, exhuma el cadáver de Inés, enterrado hasta entonces en Coímbra, y con gran aparato lo hace trasladar para Alcobaça, donde lo coloca en el sarcófago sobre el que descansa una estatua yacente que tiene en la cabeza una corona real. A estos hechos históricos, transmitidos por los cronistas y documentados por el sepulcro de Alcobaça, muchos elementos legendarios se han ido añadiendo a lo largo de los siglos, unos formados por transmisión oral y recogidos por varios textos literarios, otros forjados por literatos que escribieron sobre Inés y luego pasados al patrimonio de la tradición oral (*).

Uno de esos textos literarios es el drama barroco Reinar después de morir, de Luis Vélez de Guevara (autor más conocido por su novela El diablo cojuelo).

Otra recreación literaria de este asunto la encontramos en el Romance del palmero:

Yo me partiera de Francia,                         
fuérame a Valladolid.                   
Encontré con un palmero,         
romero atán gentil.                       
«Ay, dígasme tú, el palmero,    
romero atán gentil,                       
nuevas de mi enamorada,                         
si me las sabrás decir».                
Respondiome con nobleza,                      
él me fabló y dixo así:
«¿Dónde vas, el escudero,                        
triste, cuitado de ti?                     
Muerta es tu enamorada,                         
muerta es, que yo la vi.                
Ataúd lleva de oro         
y las andas de un marfil.                             
La mortaja que llevaba                
es de un paño de París.                              
Las antorchas que le llevan,                      
triste, yo las encendí.
Yo estuve a la muerte della,                     
triste, cuitado de mí.                    
De ti lleva mayor pena                 
que de la muerte de sí».                            
De qu'esto oí yo, cuitado,          
a caballo iba y caí.                          
Una visión espantable                 
delante mis ojos vi.                       
Hablome por conhortarme,                         
hablome y dijo así:        
—«No temas, el escudero,                          
no hayas miedo de mí.
Yo soy la tu enamorada,                             
la que penaba por ti.                    
Ojos con que te miraba,
vida, no los traigo aquí.
Brazos con que te abrazaba                      
so la tierra los metí».                    
—«Muéstresme tu sepultura                     
y enterrarme he yo con ti».      
—«Viváis vos, el caballero,                           
viváis vos, pues yo morí.                            
De los algos deste mundo                         
fagáis algún bien por mí.                            
Tomad luego otra amiga             
y no me olvidéis a mí,                  
que no podéis hacer vida,                         
señor, sin estar así».

También Lope de Vega dedicó uno de sus sonetos al arrojado amor de Don Pedro de Portugal por Doña Inés de Castro:

Con pálido color, ardiendo en ira,
en los brazos de Avero y de Alencastro,
de la difunta doña Inés de Castro
el bravo portugués el rostro mira.

Tierno se allega, airado se retira,
(trágico fin de amor, infeliz astro)
y abrazado a su imagen de alabastro,
con este llanto y voz habla y suspira:

—Si ves el alma, Nise, de mis ojos
desde el cielo, en que pisas palma y cedro,
más que en este laurel y fe constante,

verás que soy, honrando tus despojos,
portugués en amor, en rigor Pedro,
rey en poder, y en la venganza amante.


(*) Fragmento del artículo El fantasma de Inés de Castro entre leyenda y literatura (Patrizia Botta, Universidad de Roma). Puedes leerlo completo clicando aquí.

MADE IN SPAIN (Paloma Sardinero)




Hay muchos inventos españoles que cambiaron el mundo y que no son muy conocidos, o quizá simplemente, pensamos que fueron obra de un ingeniero americano o de un científico alemán de mente privilegiada.

Cientos de personas dedicaron su vida a la ciencia y a la tecnología en diferentes puntos de nuestro planeta, pero pocos son los que pasaron a la historia, o quizá haya sido la historia la que no ha sido tan justa con ellos. De sus mentes y su esfuerzo disfrutamos hoy en día. Algunos de ellos quemaron sus vidas por sacar adelante sus diseños. Algunos de ellos, incluso, tuvieron que cambiar su nombre por otro, perdiendo su propia identidad.

Muchos inventores españoles invirtieron muchas horas y mucho esfuerzo trabajando en sus proyectos, a veces poniendo dinero de su propio bolsillo, pero son pocos los que son recordados por haber contribuido a construir el futuro, y por supuesto, algunos de ellos son totalmente desconocidos y permanecen en un total olvido.

Todos sabemos que Isaac Peral fue el ingeniero murciano que diseñó el primer submarino de acero impulsado por energía eléctrica, toda una revolución. El problema es que la historia no nos ha enseñado, o al menos yo lo desconocía,  que sobre mediados del siglo XIX, concretamente en el año 1859, el catalán Narciso Monturiol sorprendía al mundo con el primer buque sumergible. Era de madera y su propulsor era manual.

Lo que ahora conocemos como helicóptero tuvo en su día un nombre mucho más peculiar: AutogiroLos primeros modelos realizados son de Juan de la Cierva, quien los diseñó en los años 20, aunque la idea central de este invento fue del mallorquín Pere Sastre Obrador.



Buscando, buscando, me he topado con el caso de la leonesa Ángela Ruiz Robles, a la que recientemente  el Ayuntamiento de Madrid ha reconocido dándole su nombre a una calle. Un nombre que quizá no sea tan popular como el de Bill Gates o Steve Jobs, pero no por ello menos importante. Ella fue la verdadera precursora del e-book en 1949. Ella misma, como otras muchas mujeres de su época, tuvo que registrar su patente con un seudónimo masculino. Lamentables los roles de género de la época.

Celia Sánchez Ramos consiguió que la realidad superase la ciencia ficción. Lo que hoy aparece en películas como «Misión Imposible» fue ideado por esta zaragozana nacida en 1959. Ella inventó un sistema para autentificar la identidad a través del reconocimiento por córnea, un método de seguridad biométrica utilizado por gobiernos, bancos, y grandes empresas.

En 2012 Teresa Gonzalo desarrolló un gel vaginal de acción microbicida y antiinflamatoria. Es de uso tópico e inhibe en un 80% el contagio por VIH en mujeres sanas. Junto con otros colegas, Teresa obtuvo un premio del Instituto Tecnológico de Massachusetts por haber desarrollado este método de prevención del VIH. Se prevé tendrá un impacto importante en países con menos recursos donde las mujeres encuentran dificultades para poder utilizar preservativos de manera consentida.

Los más mayorcitos recordaréis la odisea que se organizaba cada vez que acudíamos a ponernos una inyección. El panorama era desolador. Te daban ganas de salir corriendo mientras esperabas a que el practicante hirviera la jeringa con aquel quemador antediluviano. Esto sucedía alrededor de los años 70, cuando las jeringuillas hipodérmicas eran de cristal. Impensable en nuestros días.

En el año 1975  el ingeniero riojano Manuel Jalón puso en marcha Febersanitas, una fábrica de jeringuillas hipodérmicas desechables hechas con plástico. Desde entonces, se han fabricado y distribuido por todo el mundo miles de millones de estas jeringuillas. Estas jeringuillas supusieron todo un avance en materia de seguridad sanitaria y a día de hoy no ha habido nadie que haya presentado ninguna alternativa mejor.

Quizás, de todos los inventos españoles que cambiaron el mundo, la fregona no sea el más revolucionario, pero sí supuso un antes y un después en la vida diaria de millones de personas. Inicialmente bautizado como «lavasuelos», este palo con un penacho de tiras de algodón en un extremo fue inventado en 1956 también por Manuel Jalón, el mismo de las jeringuillas. Brillante.

El Tren Articulado Ligero Goicoechea Oriol, más conocido como Talgo, fue una auténtica revolución en el mundo del ferrocarril. Inventado en 1942 por Alejandro Goicoechea e impulsado por José Luis Oriol, alcanzó fama internacional durante los años 60. Su mayor avance supuso un sistema de rodadura completamente diferente al de los trenes convencionales, lo que permitiría lograr una mayor velocidad con la misma potencia.



El traje de astronauta. Pues sí, lo inventó un español. La “Escafandra Estratonáutica”, que fue la base de los trajes de astronauta que llevaron al hombre a pisar por primera vez la Luna, la diseñó en 1935 el granadino Emilio Herrera Linares.

Podría seguir y seguir… Hay muchos más, como por ejemplo el teleférico, un prototipo inventado por Leonardo Torres Quevedo. Registró la primera patente de lo que él llamó Sistema de camino funicular aéreo de alambres múltiples, aunque no fue hasta 1907 cuando el primer teleférico para el transporte de personas entrara en funcionamiento en el Monte Ulía (San Sebastián).

La calculadora, diseñada por el inventor español Ramón Verea quien, en 1878, logró diseñar la primera calculadora mecánica capaz de realizar las cuatro operaciones aritméticas básicas: suma, resta, división y multiplicación.

El futbolín, diseñado por Alejandro Campos para poder disfrutar de su deporte favorito tras haber sido herido durante la Guerra Civil.

Invenciones que parecen no encajar con la época en que se produjeron, como la epidural de Fidel Pagés que se sigue utilizando en el presente, aunque su nombre lo hayamos olvidado.

Y cómo no, mi favorito, un invento de origen español que ha dado la vuelta al mundo y que se popularizó a raíz de la serie televisiva «Kojak». Se trata de un caramelo con un palito diseñado para que los niños no se atragantaran. Por su puesto os estoy hablando del Chupa Chups, inventado por Enric Bernat en 1957.



Aquí os he descrito algunos inventos que cambiaron el mundo, pero me dejo muchos más en el tintero. Todas estas personas trabajaron muy duro para mejorar nuestras vidas y, por supuesto, sí, todos ellos fueron y son Made in Spain, aunque a primera vista no lo parezcan.

Brillantes inventores, en diferentes épocas de nuestra era, unos quedaron en la cuneta y otros gozaron de una fama de cinco minutos. Salvo excepciones, se puede decir que la gran mayoría han sido los grandes olvidados de nuestra historia.

Gracias a todos por vuestro talento, esfuerzo y pasión incansable por la ciencia.


Paloma Sardinero

domingo, 19 de enero de 2020

El arte en la Edad Media

La Edad Media comienza en el año 476 (siglo V) con la caída del Imperio Romano y termina en 1492 (siglo XV) con el descubrimiento de América. Es una época de la historia caracterizada por el inicio del dominio de la Iglesia Católica sobre todos los aspectos de la vida. La producción del arte en este periodo es financiada y encargada por la Iglesia.

El arte medieval temprano reflejó las diferencias entre el desarrollo de la religión católica en Occidente y el Imperio Bizantino en Oriente. El periodo artístico desde la caída del Imperio Romano de Occidente hasta el año 1000 se denomina Prerrománico. A partir de esta época se desarrollan el arte Románico y el arte Gótico.

Por medio de la pintura y escultura se tenía como objetivo enseñar al pueblo la palabra de Dios, ya que la gran mayoría era analfabeto.

El arte visigodo apareció en el siglo V en España, cuando este pueblo instaura el reino hispano visigodo. Mientras el arte bizantino produce espléndidos monumentos en Occidente, en España, este arte es mucho más sencillo, busca imitar los viejos monumentos romanos y las creaciones bizantinas.

Los templos visigodos, después de la segunda mitad del siglo VI, son de planta de cruz latina o griega, formada por un rectángulo del que sobresale la cabecera, con una o tres capillas, alas a los lados y pórtico a los pies. Se construyen con arcos de herradura, muros de sillares regulares montados a hueso o grapas, sin contrafuertes; cubiertas con bóvedas de cañón (peraltadas) y de aristas, columnas y capiteles.

La escultura es decorativa, con motivos geométricos, vegetales y animales; las escenas del Antiguo y Nuevo Testamento son muy escasas.


El Románico


El arte románico abarca en Europa desde finales del siglo X hasta el XIII. Se utiliza el término románico porque sobre todo la arquitectura tenía similitudes con la arquitectura romana. Fue creado por la Iglesia Católica Romana y la gran Orden Benedictina.

La arquitectura es la rama artística más desarrollada en el arte románico. Se construyen templos, iglesias, monasterios, castillos, abadías y murallas. En la arquitectura se ve ampliamente la influencia del arte romano, con elementos del bizantino e islámico. Se caracteriza por la grandiosidad de sus edificaciones. Son edificaciones austeras, sencillas y sólidas. En esta época el arco de medio punto es el empleado para formar las bóvedas de cañón que sostienen la techumbre. Los muros eran muy gruesos para evitar los derrumbes. Los vanos son escasos y muy pequeños. Las techumbres al principio eran de madera y más tarde de piedra. La decoración se concentra en los pilares, las portadas y las cornisas. La torre no podía faltar en las iglesias románicas. La planta era de cruz latina, con un número impar de naves, siendo la central más amplia que las laterales. Los capiteles están decorados con escenas y personajes bíblicos.

Las pinturas narraban de manera simple la palabra de Dios. En la pintura las figuras son bidimensionales, se presentan de modo frontal, no tienen profundidad, el fondo es liso, toda la atención se concentra en la figura. Todas las figuras son de tamaño y altura muy similares para indicar que todos los hombres son iguales ante Dios. La distribución es jerárquica, para distinguir los personajes de mayor importancia. Emplean colores muy intensos para representar de manera muy expresiva las figuras y los personajes. Las principales técnicas eran: al fresco, al temple y pintura de cera.
Planta de la catedral de Gerona

La escultura, aunque no de manera tan notable como la arquitectura, aplica los mismos términos para enseñar la palabra sagrada. Se observan elementos bizantinos, persas y árabes. En los relieves, la diferencia de tamaño indica la importancia de la figura representada. La expresión de la figura, en ocasiones, es muy exagerada, y en otras muy plana. El resultado final es tosco y rígido.

Ejemplos de catedrales románicas en España: Gerona, Tarragona, Santiago y San Isidoro en León, entre otras.

El Gótico


El término gótico se refiere al arte desarrollado en Europa durante la Baja Edad Media, entre el románico y los comienzos del Renacimiento. Este arte sigue siendo pagado por la Iglesia, de modo que todos son temas religiosos. Al final del gótico empiezan a aparecer figuras profanas.

A diferencia del románico, en el que Dios se representa como una figura temible y justiciera, en el gótico se representa un Dios paternal, amable, misericordioso y cercano.

Se considera que el gótico nació en Francia (1137) con la construcción de la iglesia de San Denis. La principal forma de expresión del gótico fue la arquitectura. Los ejemplos más destacados son la catedral de Notre Dame, en Francia, la catedral de Colonia en Alemania y las abadías de Canterbury y Westminster en Inglaterra. Las nuevas técnicas de construcción permiten abrir grandes ventanales, llenos de cristales de colores por los que entra la luz, formando un efecto embriagador como única fuente de luz. Durante este periodo los vidrios se convirtieron en la principal forma de decorar el interior de las iglesias. En Italia las enormes ventanas nunca llegaron a convertirse en una forma de decoración. En su lugar, los murales y frescos y otras formas de pinturas continuaron decorándolas. En esta época, el artista individual no se conocía, las obras las hacían los gremios al mando de un maestro en su taller.

El empleo de las figuras es cada vez más realista. Se usa la perspectiva en las pinturas. Las técnicas más empleadas en la pintura del gótico fueron el temple y el óleo, que permiten un acabado más preciso que el fresco.

A partir del siglo XIII, los pintores representan al ser humano con mayor precisión, reflejan sus sentimientos y las figuras son más reales.

La escultura se empleó sobre todo en la decoración de las fachadas de las catedrales. Los materiales son piedra, madera policromada, marfil o metal. El tallado de la piedra es más realista que en el arte románico, con más profundidad y cuerpos más precisos.

Predomina el naturalismo idealizado. Se dota de volumen a los cuerpos para incrementar las expresiones y el movimiento.

Además de las estatuas, monumentos y la decoración de fachadas, se desarrolla un nuevo tipo de esculturas, sepulcros, púlpitos y sillas del coro que emplean madera. La escultura es en relieve, sobre las fachadas y sobre las tumbas. En las fachadas principales o pórticos de las iglesias se tallan sobre la roca generalmente figuras para decorar la entrada. En el tímpano (zona central de la puerta ) se continúa representando como en el románico: el juicio final y el pantocrátor. En las jambas de las puertas se tallan estatuas de santos, apóstoles, evangelistas y otras figuras de la Iglesia.

Las columnas presentan capiteles donde se narra la vida de santos o pasajes de la Biblia.

El retablo es una invención del arte gótico y se divide en calles verticales, siendo la central más grande, y en pisos horizontales. Suelen combinarse esculturas con pinturas. El diseño de relieves para sepulcros adquiere cierto desarrollo, puesto que es signo de prestigio e importancia de la vida del difunto.

Las figuras de los muros no están incrustadas en ellos, sino que sobresalen. Presentan dos temas preferentes, el Cristo crucificado y la Virgen con el niño.

La arquitectura gótica se diferencia notablemente de la románica. En la románica los techos eran redondeados, los muros gruesos y las ventanas escasas. En cambio, en la gótica, el techo se eleva, los muros se adelgazan y se abren grandes ventanales que inundan de luz el interior. Para repartir el peso de los muros se construyen elementos fuera de la catedral (contrafuertes).

En el interior todo parece más frágil y ligero; en cambio, en el exterior, todo se ve mucho más grande y decorado con gran variedad de relieves y esculturas. El peso no se apoya todo en los muros como en el románico. Los arcos de medio punto se sustituyeron por los arcos ojivales o apuntados, y esto permitió hacer estructuras más altas y estrechas. El techo abovedado también permite repartir el peso y elevar la altura. Las gárgolas son un elemento gótico muy reconocido. Se trata de un elemento muy funcional y decorativo a la vez; son cabezas de criaturas monstruosas por las que se desaloja el agua de los tejados.

Las catedrales góticas están consideradas como grandes obras de arte.

Ejemplos de catedrales góticas en España: Burgos, León, Salamanca y Sevilla, entre otras.


Mercedes Gozálvez

Construcción de una central hidroeléctrica



Después de múltiples fotografías aéreas, una caravana de vehículos avanza por un páramo calcinado por el sol. Se encaminan en dirección al río Tajo, donde se va a construir la central.

Todos van llenos de aparatos para comprobar el terreno, haciendo sondeos, comprobando los distintos niveles geológicos, usando teodolitos para sacar las curvas de nivel, etc…

Una vez realizadas las pruebas en distintas localizaciones del río, estas se envían a los laboratorios, y una vez comprobado todo, se elige el lugar donde se va a ubicar la central.

En el Departamento de arquitectura, con todos los datos, se elaboran los planos de las diferentes estructuras y se envían a la Confederación Hidrográfica de Tajo para su aprobación, donde se comprobará el impacto ambiental. Una vez aprobado todo el proyecto, se inician diversas obras necesarias para ubicar a todo el personal de la Empresa que participará en el seguimiento de todas las obras.

En primer lugar se construye el poblado que albergará a este personal. Posteriormente se notificará en todos los pueblos cercanos, para que las personas que estén interesadas en trabajar en la construcción se apunten según su oficio en las distintas empresas que participan. La gente de estos pueblos reciben con alegría estas noticias, ya que en esta zona de Extremadura hay muy poco trabajo y mucha pobreza.

Algunas personas ya han participado en la construcción del poblado obrero y continuarán en distintos trabajos para la construcción de la presa que albergará los generadores.

Lo primero que se realiza es una pequeña presa llamada ataguía, donde se retendrá el agua del río y se desviará a través de un túnel lejos de donde se construirá la presa. A la terminación de estos trabajos, se inician las excavaciones de los cimientos de la presa.

De repente, una sirena aúlla sobre el ruido de la maquinaria que está efectuando las excavaciones. Al principio, la gente, asustada, sale corriendo en todas las direcciones sin saber a qué se debe este hecho. Poco a poco, y con ayuda del personal preparado para estos eventos, se calman los ánimos y la gente se encamina tranquilamente hacia los sitios indicados. Suena una segunda vez, y a la tercera una tremenda explosión retumba en el aire: una nube de polvo llena el ambiente dejando aturdido al personal. Ha sido una voladura controlada por haber encontrado alguna roca que dificultaba el avance de las excavadoras en el terreno. Cuando vuelve la calma y el polvo se deposita en el terreno, todo el mundo se vuelve a encaminar a sus lugares de trabajo.

Finalizada la cimentación, se empiezan a levantar estructuras para contener el hormigón que conformará la estructura de la presa. Grandes cubas con hormigón se desplazan por unos cables por encima del personal obrero y van depositando el hormigón en los lugares indicados.

A medida que se va elevando la construcción, grandes andamios se van levantando, igual que una tela de araña sobre esta. Cientos de obreros sobre ellos semejan un enjambre de abejas siguiendo las órdenes de sus encargados.

A la vez que se construye la presa, se va construyendo el lugar que albergará los generadores eléctricos. Esta obra faraónica se termina en unos pocos años, a pesar de los miles de trabajadores que han participado.

La gente de los pueblos regresa a sus hogares, a sus rutinas anteriores, esperando otro nuevo acontecimiento que pueda darles otra nueva oportunidad de trabajo.

Luis Pinzolas
(Luis Pinzolas ha sido trabajador de la compañía de electricidad Iberdrola.)

jueves, 16 de enero de 2020

CINE Y TERTULIA LITERARIA: FORTUNATA Y JACINTA


MARTES 28 DE ENERO

A LAS 18:00 SE PROYECTARÁ
LA PELÍCULA
FORTUNATA Y JACINTA
(1969)
[con Emma Penella, Julia Gutiérrez Caba, Terele Pávez, Máximo Valverde, Antonio Gades…]

 A LAS 20:00 TENDREMOS
NUESTRA HABITUAL
TERTULIA LITERARIA

miércoles, 15 de enero de 2020

A Guide to Happiness, by Alain de Botton

Socrates on Self-Confidence (Part 1) - Why do so many people go along with the crowd and fail to stand up for what they truly believe? Partly because they are too easily swayed by other people's opinions and partly because they don't know when to have confidence in their own.


Epicurus on Happiness (Part 2) - British philosopher Alain De Botton discusses the personal implications of the ancient Greek philosopher Epicurus (341-270BCE) who was no epicurean glutton or wanton consumerist, but an advocate of "friends, freedom and thought" as the path to happiness.


Seneca on Anger (Part 3) - Roman philosopher Lucious Annaeus Seneca (4BCE-65CE), the most famous and popular philosopher of his day, took the subject of anger seriously enough to dedicate a whole book to the subject. Seneca refused to see anger as an irrational outburst over which we have no control. Instead he saw it as a philosophical problem and amenable to treatment by philosophical argument.


Montaigne on Self-Esteem (Part 4) - Looks at the problem of self-esteem from the perspective of Michel de Montaigne (16th Century), the French philosopher who singled out three main reasons for feeling bad about oneself - sexual inadequecy, failure to live up to social norms, and intellectual inferiority - and then offered practical solutions for overcoming them.


Schopenhauer on Love (Part 5) - Alain De Botton surveys the 19th Century German thinker Arthur Schopenhauer (1788-1860) who believed that love was the most important thing in life because of its powerful impulse towards 'the will-to-life'.


Nietzsche on Hardship (Part 6) - British philosopher Alain De Botton explores Friedrich Nietzsche's (1844-1900) dictum that any worthwhile achievements in life come from the experience of overcoming hardship. For him, any existence that is too comfortable is worthless, as are the twin refugees of drink or religion.

Top documentary films.

jueves, 9 de enero de 2020

TEATRO EL PRÓXIMO 5 DE FEBRERO


VEN CON EL CEPA AL TEATRO A VER...



REINAR DESPUÉS DE MORIR


de Luis Vélez de Guevara


Pincha aquí para acceder el texto completo de la obra

Pincha aquí para conocer el reparto y obtener más información


MIÉRCOLES 5 DE FEBRERO

20:00

Teatro de la Comedia


Calle del Príncipe 14, Madrid

(Metro Sol)


APÚNTATE EN CONSERJERÍA

PRECIO ENTRADA:

12,50€

(Patio de butacas)

PRÓXIMA TERTULIA: FORTUNATA Y JACINTA




PRÓXIMA TERTULIA LITERARIA EN EL CEPA PABLO GUZMÁN:
FORTUNATA Y JACINTA
(de Benito Pérez Galdós)

MARTES 28 DE ENERO
A LAS 20:00
Te esperamos



jueves, 5 de diciembre de 2019

Beauty and the Beast


Why does Belle decide to save the fallen Beast wounded by wolves after he has been so tough, so coarse and so brutal? She is on the verge of running away but then, she turns her head. Are there not such moments in our lives when we have to choose whether to be good or evil? Why do we choose what we choose? Why are we who we are?

The spell puts Beast in the plight of an imposible endeavour. He needs the acquiescence of a woman whom he is retaining against her will. He needs her to love him, which is the same as loving her own jail. It’s necessary that he releases her, and, in doing so, the story touches a string, for all our lives possit a similar conundrum. What we want from others can only be obtained by their consent. The Beast’s bad temper is nothing but a shortcut.

We love the beast’s surroundings, servants, books and petty arguments, and hate the villagers with their prejudices and narrow-minded view of Belle. We know she chose the best of the two worlds. We need those two characters to reunite so much that our suspension of disbelief is paramount when the end strikes us with the death of one of them. Magic here is not only acceptable, but a must.